lunes, 26 de septiembre de 2011

Día 10. 2011. El de la despedida y el cierre

Otro año más que se acaban estos diez días festivos. Diez días de traje, marrón, traje teja, cojo la capa, no que hace mucho calor, la espada al cinturón o a la espalda, calzoncillos de pata o slip (de gala el último sábado, claro), me tomo una cerveza o un binfiter de sigrams tónica de Larios... Muchas decisiones importantes que uno debe ir tomando con el cuerpo cada vez más cansado. Pero que se toman, y el ratico se pasa la mar de bien en Ebussus!!
El día ha comenzado tempranico, con la comida del cierre en el campamento hondero y su posterior fiesta del agua, aunque en este viaje el menda se ha evaporado cual gas y ha decidido que una retirada a tiempo es una vistoria para poder llegar esta noche a los fuegos. Antes del castillo, hemos hecho, Melón, amigos y familia, una visitica al mercao medieval, donde los puestos de utensilios varios estaban decentes, pero los de la comida eran la reostia y uno no podía ni decidir. De todas formas, como la cabra tira al monte, aceptamos la degustación, previo pago de 2 sestericios (que ya somos romanos), de una cerveza realizada en Cartagena. ¿En fábrica? Noooo, en la casa de que nos la pone:

Y que al final, con tanta variedad, nos vamos a cenar a los Caballeros e Isis de Cartago, que los lleva el Galeón y algún bocadillico tendrá... Y que nos comemos casi que la mesa por 13 sestericios por barba (ficticia, claro, porque los barbudos hoy nos hemos rasurado como manda la tradición).
Y llegan los fuegos, a su hora, las doce, aunque haya estado el campamento a oscuras durante media hora antes porque se ha ido una fase de no sé qué y no se arreglaba la jodía. Ya repuestos, los fuegos normalicos, de crisis, de unas palmericas por aquí, unos paracaidas por allá, y mucho petardo al final para hacer ruido.
Terminados los fuegos, muchos han abandonado el barco 2011. Otros nos hemos quedado y hemos visto como ni en el último día se puede estar trankilo en Ebussus:

De todas formas, la caja de esta noche no abrá sido muy allá, porque la mayoría de las visitas extrañas de 'quedo en el tío que mea y si la música friki está puesta pues allá que entro'... Esa gente, consumir consumir, no consume.
Y que se cierra en contenedor porque la gente va a acabar entrando a mear al reservao y no queremos problemas. Y que el Quiño se acaba casi la binfiter, a falta de sigrams, pero a una hora prudente se abandonan tierras baleares para visitar, finalmente, la Navalis, donde no hay música, pero sí binfiter de sigrams tónica de Larios, y terminamos de hacerle caja al NO cuñao y de hacernos foticos con la legión y un invitado de lujo:

Pero a las 3.00 la cosa está mu floja, o mu rara, y Melón y el menda, acompañados por romanos, primos, amigos y demás, decidimos abandonar el Campamento.
Y que mañana será otro día. Y que cuando sean las once de la noche y me meta en la ducha y mire la mesa del comedor y no vea los trajes, que se estarán lavando, y no vea la espada, que estará ya enfundada... Pues seguro que me entra un no sé qué que qué sé yo... Pero bueno, es lo que toca: Esperar hasta el año que viene!! Eso sí, por primera vez en nueve años de hondero, voy a ir al desmontaje (y es que el paro es lo que tiene) y seguro que así, las penas son menos penas.
Gracias a todos por leer, por los ánimos, y por las críticas. Nos vemos (o nos leemos, mejor dicho) el año que viene!!!

PD: Honderos!!! Cuál es vuestro oficio!?!?!?!?!?

2 comentarios:

Elena Dj dijo...

Jo, madre mía, me he emocionáo con el final...

Tete dijo...

Grande tu blog. Todo un placer leerlo. Ha sido buena terapia para los problemas de alzheimer que nos dan a los Honderos por la noche...