Día 0. 2010. Houston, desde aquí arriba veo mi casa!!!!

Bienvenidos al maravilloso mundo del disparate y la tonería hondera de manos de "este humilde speaker" (gracias Pepe Reina por estas palabras) otra vez. Me he propuesto este año escribir todos los días, a ver si lo cumplo, porque creo que esta promesa ya la hice el año pasado y quizá el otro... No recuerdo. En fin... o an fan... de eso sí que me recuerdo... Que hoy hemos vuelto a inaugurar extraoficialmente el campamento hondero... bueno, todo el Campamento, pero el hondero sobre todo.
Ha molado ver a gente que no veía en todo un año y a otra que, habiéndola visto dos días antes, o el día anterior, he saludado como si hiciera un año que no les veía... Y es que, cuando uno ve su campamento ahí, en to lo alto (y nunca mejor dicho), uno se siente en casa, en familia.
Y que damos que hablar. Quizá este año más que en los anteriores. Porque el pasado año era cosa de que "joder los honderos que llueva o diluvie siempre están en su campamento, ahí, haciendo caja", y de verdad que sí. Pero además de esa promesa o, incluso, diría yo que obligación (aceptada sin reparos ninguno) de tropa, además digo, este año estrenamos alturas. Nos hemos ido así como que cinco metros (y a lo mejor me quedo cortísimo) pa arriba... Y mola. Mola mucho. Os invito a que experimenteis el mirador hondero. Hay quien ya ha sido testigo del panorama y que ha quedado prendado... Sólo queda que nadie se nos despeñe y todo será un éxito.
Hoy ha sido día de cervezas, mañana (o hoy si uno mira la hora) toca arrimarse ya a los binfiter-tonica de Larios... (que de eso también me recuerdo)...
Ya digo. Mola verse con tus hermanos un año más, y compartir esos momentos de planificación en plan: "disfruta de estas Fiestas, que nadie te las fastidie" y esas cosas de familia que tanto se agradecen.
Y vuelvo a decir. Quisiera escribir todos los días en esta parafernalia bloguera que no comprendo, pero a la que dedico ciertos minutos de mi trompeta nocturna para que quien me conoce y quien no, pueda ver, un tanto en la distancia, cómo se las gasta un hondero balear... Quien quiera conocer más, en Ebussus tiene la puerta abierta y la cámara de fotos encendida...
Ni que decir tiene que mañana ya habrá imagen gráfica de la noche y sus cosas.
Quien avisa no es traidor, pero el tema cameral tiene la pantalla de visión de fotos rota y hasta que no llegue a casa no veré las caras de la gente y sus poses... Ahí queda eso.