Dia 1. Unos Morancos en el límite y noche rekeniana de Campamento.

Escribo a mediodía porque ayer, creo recordar, acabé muy perjudicao, o, simplemente, con algún gyntonics de más. De hecho, me parece a mí que las teclas aún están borrosas aunque sean las tres de la tarde… Y yo aquí intentando sacar un periódico para mañana.
En fin, o an fan, que la primera noche oficial del Campamento no defraudó, realmente. El día lo ‘iniciaron’ las arengas y el pregón de inauguración de los festejos, las primeras por parte de los personajes cartagineses, Aníbal e Himilce, y romanos, Escipión y Emilia Paula, los dirigentes festeros y, obviamente, la alcaldesa de Cartagena, doña Pilar Barreiro. Qué bonito!! Siempre tan al tanto de lo que ocurre en los festejos y de las necesidades del festero. Esas cosas siempre se agradecen. (Trato de que no se me note el sarcasmo).
Claro que luego llegaron Los Morancos, los pregoneros, y tampoco es que mejorasen las carcajadas provocadas por una motores un tanto al margen. Pero bueno, más humoristas que la primera edil, lograron que los asistentes se fueran del pregón con un sabor de boca ‘agradable’, tras tocar el límite de lo políticamente correcto y de lo desagradable con sus alusiones al mundo inmigrante y esas cosas. Aún así, lo dicho, humoristas y, por eso mismo, permisible.
Luego, marcha hacia el Campamento en formación ‘tumulto’, patentada por el mundo ilergete-balear, entre indíbiles y honderos. Ya en los recintos, música a partir de las 00.30 horas, media hora después de lo establecido, para no levantar sospechas. Al poco, Sergio Pazos aparece en la entrepierna del Chiquitín y ‘el Quiño’ se vuelve a soltar frente a la cámara y el público objetivo, recordando esas conferencias de Ebussus, y poniendo a los Honderos donde debemos estar: calificados como juerguistas, borrachillos y, ante todo, mercenarios. Se coloca el Pazos el casco de Carpón y subimos a una guerrera al Dios para la promo del programa que presenta el gallego en ‘7 Región de Murcia’ titulado ‘¿Dónde está Sergio?’… En fin, currantes de productora pagados con la pasta que recauda el gobierno regional, de los bolsillos de todos los murcianos, y cartageneros también, para subvencionar la tele autonómica, la tele de todos.
Más tarde, si las neuronas no me fallan, y no estoy muy seguro de ello: visitas, más visitas, Reke en Amílcar Barca, gyntonics, más gyntonics…
Y apareció la comitiva fotógrafa del mundo periodístico cartagenero. Movidos por la sed de imágenes curiosas, y algún que otro copazo, llegaron armados con sus cámaras, muy bonicas ellas, para retratar, lo más verazmente posible, lo borracha que se puede poner la gente en el primer día de las Fiestas.
Una vez cortada la música, sobre las cinco, o las seis, o las siete… Toque de retirada. Mi coche en la Muralla del Mar… ‘Iván, ¿me puedes acercar a mi casa?’… Correcto. Un descanso para el guerrero. De camino hacia fuera del Campamento: Carlos Bastida, Maloles, Sergio y Elena… equipazo!!! Y esas magonas warmaperas siempre resistiendo.
Un lujazo para la primera noche. En la segunda, con la gran dama hondera, sobre el papel, la cosa pinta mucho mejor. Seguiremos conectados.