Día 3. Dejad que los festeros vengan a los Honderos.

Otra jornada más de lucha... Y qué lucha!! aunque cayeron algunas gotas en forma de pequeño chaparrón sobre las nueve de la noche o así, la noche en el Campamento no se vio afectada. Tras la tradicional ‘Pollada’ de Ebussus, donde los guerreros comemos pollo asado así como que con las manos y eso, vino el monólogo de Ángel Rielo. La caseta, a reventar!! El resto... con cartel de ‘Se traspasa’. El Rielo, un crack como ya demostrara el año pasado en su primera visita.
Tras el monólogo del artista, ¡coño, que vienen los magones!... Y el recuerdo se hace lúcido. ‘¡Ostia, tenemos su ‘caballo’ por ahí escondido!’... ¡Queremos beber, queremos beber! Pues nada, a beber. Salen con su caballo rescatrado y, ¡leche!, las Fuerzas de Choque Extraordinarii con los nuevos... Lección de amabilidad con los que le echaron la bronca a un hondero que se subió a la muralla interior de su campamento, pero eso a ellos les trae sin cuidado. Ale, pues al Dios.
Al rato, un pequeño grupo de Naveganiberoceltas o algo así, llegan al campamento. ‘Venimos a invadiros’... ‘Pero si sois cuatro, almas de cántaro’... Venga, para adentro. Y como esto no puede ser (es lo que tiene tener a 30 honderos un domingo por la noche en la caseta balear, que llama mucho al festero), amarramos a los postes del reservado a un extraordinarii, antes a dos Vernáculas, y nos vamos de saqueo por el campamento.
Otro hueco para la lucidez en una cabeza afectada: ‘Los magones nos han birlado el ariete...’ ‘Y también han secuestrado a Lidia’, añade una fémina. ¡Coño!. A por ellos. En su campamento, el Mario y su tambor: ‘Dame tiempo para reunir a los guerreros que están por ahí desperdigados’. Diez minutos. Antes, los Lozano se llevan el Escorpión, o ballesta, de la casa magoniana. Pa la saca. También aparecen en Ebussus un escudo de la Vernácula y el faldín del lince... ¿Y otra vez el caballo de los magones?... ‘¡De aquí no nos vamos serenos esta noche, está claro!’. A Lidia la liberan, pero el ariete sigue en la casa de Magón. Postponemos todo para el día siguiente.
Al Dj de nuestro campamento le han malaconsejado el tipo de música, y la caseta está vacía si no fuera por los honderos. Ilergetes, al lado, con el 40% de los festeros del campamento... Algo no funciona.
Aún así, corte de música a las 4.00 y abandono del recinto a las 5.00, con sus respectivas patatas fritas y tal, esta vez sin clave económico.
Las cosicas, guardadas para que las recojan hoy sus dueños. Nosotros iremos a por el ariete.
Y por esas cosas que tienen los gyntonics, el resto es una nebulosa difícil de aclarar. Siento si me he olvidado de algunas cosillas que ocurrieron ayer, pero el perol no es que me de para mucho a estas alturas de las Fiestas.
Un saludo.